Evangelio miércoles 17 de agosto

Martes 16 de agosto de 2022 | Osvaldo Andrés Iturriaga

17 DE AGOSTO DEL 2022

Evangelio según San Mateo capítulo 20, 1 - 16

Miércoles de la Vigésima Semana del Tiempo Ordinario

Porque el Reino de los Cielos se parece a un propietario que salió muy de madrugada a contratar obreros para trabajar en su viña. Trató con ellos un denario por día y los envío a su viña. Volvió a salir a media mañana y, al ver a otros desocupados en la plaza les dijo: 'Vayan ustedes también a mi viña y les pagaré lo que sea justo'. Y ellos fueron. Volvió a salir al mediodía y a media tarde, e hizo lo mismo. Al caer la tarde salió de nuevo y, encontrando todavía a otros, les dijo: '¿Cómo se han quedado todo el día aquí, sin hacer nada?'. Ellos les respondieron: 'Nadie nos ha contratado'. Entonces les dijo: 'Vayan también ustedes a mi viña'.
Al terminar el día, el propietario llamó a su mayordomo y le dijo: 'Llama a los obreros y págales el jornal, comenzando por los últimos y terminando por los primeros'. Fueron entonces los que habían llegado al caer la tarde y recibieron cada uno un denario. Llegaron después los primeros, creyendo que iban a recibir algo más, pero recibieron igualmente un denario. Y al recibirlo, protestaban contra el propietario, diciendo: 'Estos últimos trabajaron nada más que una hora, y tú les das lo mismo que a nosotros, que hemos soportado el peso del trabajo y el calor durante toda la jornada'. El propietario respondió a uno de ellos: 'Amigo, no soy injusto contigo, ¿acaso no habíamos tratado en un denario? Toma lo que es tuyo y vete. Quiero dar a este que llega último lo mismo que a ti. ¿No tengo derecho a disponer de mis bienes como me parece? ¿Por qué tomas a mal que yo sea bueno?'. Así, los últimos serán los primeros y los primeros serán los últimos».

Meditación de Osvaldo Andrés Iturriaga Berríos

"Quiero dar a este que llega último lo mismo que a ti. ¿Por qué tomas a mal que yo sea bueno?"

Siento como si el Señor me dijera "el Reino de los Cielos no se rige por las lógicas humanas, sino que por la sabiduría del Padre. Ustedes no lo entienden ni lo aceptan, ya que sus criterios de justicia se basan en construcciones racionales, que muchas veces no se relacionan con el amor infinito de Dios, sino con el egoísmo humano. Por eso, cuando sientas que Dios es injusto contigo, pide que el Espíritu te dé el entendimiento y sabiduría para agradecer tus dones, sin envidiar los de los demás.

Muy frecuentemente me sorprendo a mí mismo en la contradicción de saberme profundamente privilegiado con diversos dones, como mi familia, mi educación, mi trabajo, mis amigos y afectos, pero al mismo tiempo quejándome porque siento que no recibo lo suficiente ya sea en lo económico o en reconocimiento como otros. Hoy el Señor me muestra que esa queja viene de mi egoísmo y de mi incapacidad de agradecer plenamente lo que tengo. Me invita a no querer ponerle límites a su amor y a alegrarme por lo que entrega a los demás, que es parte de la historia que Él construye con cada uno.

Querido Jesús, que distinta sería mi vida si supiera agradecer por lo que tengo y no vivir pendiente de lo que das a los demás. Ayúdame a recordar que no soy el centro del mundo, y que tu sabiduría y amo. son infinitamente superiores a los míos. Regálame tu Espíritu Santo para poder ser justo y bueno como eres Tú; que pueda encontrar mi verdadera felicidad en servirte a ti, sin importar la recompensa que reciba a los ojos del mundo. Bendito seas por siempre Señor.

AMÉN

Comentarios
Nombre:   Procedencia:
Comentario:
Código de seguridad:   captcha
Caracteres restantes: 1000